Orgullosa de su estirpe, adorando a su familia, y amigos, enarbola la
felicidad de ser una Española de pura raza. Es la Amiga extraordinaria que jamás nos
abandona, que siempre conjuga el verbo, Estar.
En sus escritos no es sólo la existencia ni es tampoco el éxtasis o el arrebato
de la poesía tradicional y de escuela.
Es mucho más profunda, es cohesión incomparable, originaria de una realidad
abismal. Es consecuencia de sus sentimientos. Sus expresiones apasionadas
adquieren la gracia y dignidad de la energía transformada en fuerza de Amor.
Tiene una huella inefable de plenitud, que alcanza en sus letras una
simbolización intensa y expresiva.
Para Julia, la reverencia al amor es a la vez devoción a lo sagrado. Es un modo
de hacer vida, una práctica, un proceso de transformación. De sus palabras emana
una lección de totalidad.
Constituye una integridad que se completa mutuamente. Su experiencia
profundamente humana, fragua lo mágico con lo humano, lo místico con el amor.
Sus poemas y reflexiones se convierten en vida misma y se ve al ser humano con
sus virtudes y sus debilidades. Reflejan el dolor y el placer, lo bueno y lo
malo, la inocencia y la sabiduría interna. Prevalece como ser humano en momentos
de angustia y de placer como una alegoría a la desnudez del alma.
Hay en ella, belleza, historia, tiempo y repetición para demostrar su vínculo
con las demás criaturas del Universo.
El escribir se convirtió en la manera de traducir sus emociones en algo
tangible.
Algo que se puede percibir es su Gran fuerza. Permite que la energía
fluya a través de sus palabras, Sencillas, Humanas, Sin Falsos Egos y Sin
Pretensiones.
Se convierte en un ser mitológico para conectar entre sí a todos los seres
humanos.
Su idea central es alejar las tradiciones formales que ciñen los parámetros
estrechos. Esta ruptura ha hecho posible abrir la experimentación, la
variabilidad, la capacidad expresiva y constructiva de su poesía libre.
Es por esta razón que veo en sus escritos y en su persona, la vida, la amistad y
el amor en toda su extensión entregados a los demás.
En las noches de nuestras vidas, Julia brilla como un lucero diciéndonos:
Aquí estoy, soy tu amiga!
En una primavera de mayo, un día 18 de 1962, vio la luz Julia Luengo Moreno,
hija mayor de 4 hermanos, de una familia de emigrantes.
Mientras proseguía con sus estudios primarios y secundarios, al mismo tiempo
cuidaba de su hermano menor, ya que su padre tenía que emigrar como tantos
otros.
Su meta era estudiar Medicina, pero como todos sabemos, muchas veces los deseos
de una carrera determinada por diversas circunstancias cambian. Su padre quería
que estudiara Magisterio, pero optó por estudiar, Mecanografía. Obtuvo su título
de Profesora de Mecanografía e instaló su propia escuela para posteriormente
emigrar con sus padres a las islas Baleares.
Su vida fue siempre unida a las letras, ya desde pequeñita, su madre le decía
que antes de saber caminar se ponía en pie en la cuna y hacia garabatos con las
uñas en la pared.
En el año 1982 escribió su primer libro, el cual no llego a publicar.
Continúa escribiendo en diferentes diarios, y sitios webs, como son: Escáner
Cultural, Locura Poética, Castillo Sekher, Pluma y Palabra, Poetas del Mundo,
etc.
En Extremadura, la tierra donde se crió y donde guarda toda su niñez, se
editaron sus poemas.
En Tenerife tierra actual en la que reside sus obras se están dando a conocer en
diversos diarios y revistas.
Madre y ama de casa, su vida siempre ha estado ligada a las letras, a la poesía.
"Cualquier lugar es bueno para escribir y transmitir los sentimientos, considero
que la poesía es eso, sentimientos que salen del corazón". Nos dice siempre Julia
Luengo.
Y así es, "En cualquier lugar, en cualquier tiempo, en cualquier
circunstancia y bajo cualquier emoción se puede escribir"